INTRODUCCIÓN de la ruta “Puig Batiat-Cadira del Bisbe-Es Moletó”
La ruta “Puig Batiat-Cadira del Bisbe-Es Moletó” es una ruta circular que discurre en su totalidad por la finca pública de Galatzó. Sube al Puig Batiat por la Coma d’Almangre, por un terreno incomodo, sin camino ni hitos que marquen la dirección a seguir. Luego desciende al Coll des Vent, por un pequeño paso. Asciende de nuevo para coronar la cima de la Cadira del Bisbe. Recorre la bonita y aérea cresta de la cadena montañosa que nos va a guiar hasta la cima de Es Moletó. Desciende al Coll des Ciuronar para atravesar la Planícia de s’Esclop y regresa al punto de partida por el Comellar de ses Sínies. Es una ruta muy exigente que requiere estar en buena forma física y tener experiencia en montaña y orientación. Presenta grandes desniveles.
DATOS TÉCNICOS de la ruta “Puig Batiat-Cadira del Bisbe-Es Moletó”
Fecha de Inicio: 05 Marzo 2024 Hora de Inicio 08:55 Distancia: 12,14Km Altitud min: 123 m Altitud máx: 866 m Desnivel Positivo: 747 m Desnivel negativo: 747 m Altitud inicial: 152 m Tiempo Total: 09:19 Tiempo Caminando: 07:40 Velocidad media: 2,2 km/h Circular Difícil
ITINERARIO de la ruta “Puig Batiat-Cadira del Bisbe-Es Moletó”
- Ca l’amo en Biel
- Granero del Diezmo
- Coma d’Almangre
- Puig Batiat
- Coll des Vent
- Cadira del Bisbe
- Es Moletó
- Coll des Ciuronar
- Planícia de s’Esclop
- Caseta de s’Esclop
- Coll de la Serra dels Pinotells
- Comellar de ses Sínies
- Font des Poll
- Pou de Ses Sinies
- Casas de Galatzó
- Granero del Diezmo
- Ca l’amo en Biel
DESCRIPCIÓN de la ruta “Puig Batiat-Cadira del Bisbe-Es Moletó”
La ruta “Puig Batiat-Cadira del Bisbe-Es Moletó” tiene como objetivo recorrer la cresta de la Serra des Vent, ubicada en la finca pública de Galatzó, y coronar sus principales cimas: Puig Batiat (644 m), Cadira del Bisbe (723 m) y Es Moletó (866 m). La ruta parte de Ca l’amo en Biel, sube por la Coma d’Almangre y desciende por el Comellar de ses Sínies.
El punto de partida de este itinerario lo he situado en la explanada usada como aparcamiento, que hay junto a la casa de campo de Ca l’amo en Biel, hoy aparentemente abandonada. Llegamos a este lugar por la carretera Ma-1032 que une Es Capdellà y Galilea. Frente al punto kilométrico 2.2 sale, por la izquierda viniendo de Es Capdellà, un camino sin asfaltar que lleva hasta la barrera de entrada a la finca pública de Galatzó. Franqueamos la barrera, fijada en un arco monumental, levantando la argolla que la cierra y seguimos adelante por el camino.
Ca l’amo en Biel
Cruzamos el torrente de Galatzó por un vado empedrado y luego dejamos a la derecha el camí de sa Font Nova que se adentra en una zona reservada a la caza en dirección a Galilea. Después de salvar otro vado también empedrado llegamos a la explanada donde dejamos estacionado nuestro coche. Comenzamos a caminar en este punto y ya a nuestra derecha sale el camino que conduce a Es Ratxo; possessió hoy explotada con el nombre comercial de La Reserva de Galatzó. Desde Ca l’amo en Biel continuamos hacia las Casas de Galatzó superando una barrera con un paso para viandantes.
Un poco más adelante, a nuestra derecha, sale otro camino, que también obviamos, señalizado como Ses Planes y que conduce hasta la zona de este mismo nombre. Y a los pocos metros sale otro camino a nuestra izquierda, llamado camino de Galatzó que conduce hasta Es Capdellà. Seguimos caminando y enseguida nos encontramos con otro camino, también a nuestra izquierda, conocido como Camí de Sa Vinya, ruta clásica para subir al Puig Batiat. En esta ocasión he optado por subir directamente por la Coma d’Almangre.
Granero del Diezmo
Continuamos por el camino principal en dirección a las Casas de Galatzó y pronto nos encontramos con una caseta a nuestra izquierda. Esta caseta es conocida como el Granero del Diezmo. El diezmo era un impuesto de origen medieval, que como se puede deducir de su nombre, suponía el 10% de la producción agrícola o ganadera que, normalmente, se pagaba como contribución a la Iglesia o al gobierno. Justo a la izquierda de la caseta se encuentra el torrente de la Coma d’Almangre. Subimos por el lateral izquierdo de la caseta y cogemos un sendero que durante un corto tramo discurre paralelo al torrente, para luego descender a su cauce.
Ahora avanzamos en subida por el lecho, donde tenemos que sortear algunas rocas. Más arriba, abandonamos esta Coma para continuar por otra que está a nuestra derecha. De seguir recto llegaríamos hasta el Coll Baix. Al poco rato dejamos esta Coma y ascendimos a la loma de la derecha. Desde aquí nos enfilamos directamente al Puig Batiat. No hay camino, ni señal alguna que indique por dónde hay que ir, si bien se trata de ir subiendo más o menos recto hacia la cima. El terreno está poblado de carrizos, palmitos y rocas que ralentizan mucho el avance. A medida que ascendemos las vistas se van ampliando ofreciendo ya una buena panorámica.
Puig Batiat
Tras una penosa y lenta subida alcanzamos la base de los acantilados del Puig Batiat. Ahora sí encontramos algunos hitos que nos conducen hasta la cima, situada a 644 m de altitud y coronada por dos grandes hitos. Desde este lugar observamos a todo nuestro alrededor unas vistas espectaculares, donde destaca el imponente Puig de Galatzó. Una vez que hemos disfrutado de esta bella panorámica iniciamos el descenso siguiendo la misma dirección de subida, para enseguida torcer a la izquierda y bajar a un nivel inferior. Ahí vemos un cercado de rejilla y un hito que señala por dónde tenemos que seguir.
Saltamos la rejilla por la parte derrumbada y descendemos por un pequeño paso muy poblado de matas de palmito. Luego giramos a la izquierda y seguimos bajando hasta encontrar otro hito. Ahora subimos un poco bordeando el acantilado del Puig Batiat. Saltamos otra rejilla y descendemos al Coll des Vent, situado a 559 m de altitud. Frente a nosotros tenemos la larga subida a nuestro siguiente objetivo, la Cadira del Bisbe (Silla del Obispo), también llamado Puig Dreçà. La ascensión la realizamos por un sendero que discurre paralelo a una rejilla que tenemos a nuestra izquierda y que no debemos cruzar.
Cadira del Bisbe
La subida es en línea recta y acaba haciéndose algo pesada. En la cima, situada a 723 m de altitud, se encuentran los restos de una edificación circular, de pared seca y gruesa, no muy alta, que posiblemente tuviera funciones de vigilancia. Esta construcción es la que da nombre a esta cumbre. Las vistas que se observan desde este sitio son igualmente impresionantes. Desde aquí nos encaminamos hacia el siguiente objetivo, Es Molestó. Primero bajamos por la cara opuesta al siguiente collado y de nuevo emprendemos la ascensión y recorrido de la bonita y aérea cresta de la cadena montañosa que nos va a guiar hasta esa cima.
Es Moletó
El ir por la cresta nos permite disfrutar del paisaje tanto a derecha como a izquierda. No hay ningún tramo con dificultad, pero si es algo aéreo, donde tendremos que hacer uso de las manos. Después de recorrer la cresta emprendemos la última subida a la cima de Es Molestó. En realidad hay dos cimas, una de 854 m de altitud y la otra de 866 m. Subimos a las dos, sin camino ni hitos y lo hicimos buscando el sitio que presenta menos dificultad. Ni que decir tiene que las vistas que ofrece esta cumbre son fantásticas.
Una vez que hemos disfrutado de estas vistas iniciamos el descenso por la cara Oeste, donde los hitos nos conducen hasta un delicado paso que finaliza en el camino del Pas des Bastó. Tomamos este camino por la derecha y enseguida llegamos al Coll des Ciuronar, situado a 819 m de altitud. Este collado separa Es Molestó de la Mola de s’Esclop. Desde aquí accedemos a la Planícia de s’Esclop, antigua zona de explotación agrícola de la finca Galatzó, con la intención de alcanzar más rápidamente el camino GR 221 por el que se sube a la cima de la Mola de s’Esclop.
Planicia de s’Esclop
Empezamos caminando por una senda que muy pronto desaparece, dando paso a un mar de carrizos y rocas que dificulta mucho el avance. Llegar al GR 221 nos llevó tanto tiempo que hubiera sido mejor haber tomado el camino que desde el Coll des Ciuronar va bordeando la cara Noroeste de la Mola de s’Esclop. Llegamos a este camino, a la altura de Es Castellet, que desde lejos veníamos divisando con su cima redondeada. Lo tomamos por la derecha y enseguida pasamos cerca de la Caseta de s’Esclop, una construcción de grandes dimensiones que evidencia que muchas personas trabajaban diariamente en esta zona.
Luego pasamos por la Era de Coll, atravesada por el sendero. El camino está muy claro y no tiene ninguna dificultad de orientación, y poco a poco en descenso se va adentrando en un bosque de pinos. Así llegamos hasta el Coll de la Serra dels Pinotells donde hay un cruce de caminos señalizado con el típico poste indicativo del GR 221 y una pared de piedra en seco que delimita los términos municipales de Calvià y Estellencs. En la pared hay un pequeño paso que comunica con el sendero que conduce a la Coma d’en Vidal y a Estellencs. Continuamos de frente por un singular e interesante tramo de camino de piedra en seco que empieza a descender.
Comellar de ses Sínies
Unos 700 m más abajo alcanzamos una bifurcación señalizada. De frente se accede a una ruta que pasando por els Pinotells, conecta con el GR 221 por el que se asciende al Puig de Galatzó. Nosotros torcemos a la derecha para descender por el Comellar de ses Sínies, por un camino que conduce a las Casas de Galatzó. En este camino encontramos vestigios de la explotación forestal que se practicaba en la finca de Galatzó en concreto para la obtención de carbón pudiendo observar mientras descendemos varias sitges y barracas de carbonero. El sendero se hace cada vez más escarpado y sinuoso, y poco a poco va perdiendo altura, pudiéndose observar unas amplias vistas del valle de Galatzó.
Más abajo nos encontramos con la Font des Poll. Se trata de un conjunto etnográfico cuya función era la obtención de recursos hídricos, a través de un pozo, que obtenía el agua por filtración, canalizada a través de una acequia subterránea. Ésta atravesaba el camino de subida a la Mola de s’Esclop, desembocando en un abrevadero de pica, que era utilizado para el almacenamiento de agua para consumo humano y animal. Descendemos unos cuantos metros más y nos encontramos con una desviación a nuestra derecha que nos permite acceder al conjunto arqueológico/etnográfico del navetiforme de Ses Sínies. Es un yacimiento arqueológico de la Edad del Bronce (1700-900 A.C.)
Pozo de ses Sínies
Un poco más abajo, llegamos a un cruce señalizado. A la derecha se va al Pou de Ses Sinies y a un Mirador. Visitamos el Pozo pero no subimos hasta el Mirador. El Pozo de Ses Sinies es un pozo excavado hasta el manantial subterráneo. Es un sistema de captación de agua por elevación destinado para el consumo humano y del rebaño. Adosado al pozo encontramos un abrevadero de pica. Más adelante, llegamos a una zona de descanso en un pinar, dotada con varios merenderos. En esta zona se pueden observar infinidad de elementos etnográficos que nos indican la actividad humana que se producía en una finca de montaña y muy especialmente los destinados a la obtención de carbón y cal.
Casas de Galatzó
Seguimos avanzando y vemos a nuestra derecha un cruce señalizado -Sa Cometa/Ses Sínies-, que nos lleva hasta la “Font de sa Cometa” y que no tomamos. Y al poco también a la derecha del camino se puede observar una desviación no señalizada que conduce a Sa Pedrera. Luego llegamos a las Casas de Galatzó que forman el núcleo neurálgico de la possessió de Galatzó. A nivel arquitectónico podemos observar un primer núcleo en donde se localizan las viviendas, la capilla, la almazara, los establos y una serie de dependencias de almacenaje agrícola.
El segundo núcleo, separado de las casas principales, está formado por unas vaquerías y demás dependencias agrícola ganaderas, hoy transformadas en alojamientos de una explotación de agroturismo. El primer conjunto de las casas se organiza alrededor de un patio central. Desde el mes de mayo de 2006, la Finca Galatzó es de titularidad municipal, fue adquirida por el Ayuntamiento de Calviá.
Continuamos por el camino y enseguida nos encontramos con el Granero del Diezmo, donde cerramos el círculo de esta ruta. Desde aquí ya solo nos queda llegar al punto de partida recorriendo el mismo itinerario, pero en sentido inverso, dando por finalizada esta extraordinaria excursión.
Los componentes del grupo hemos sido: Jaime Palmer y yo Juan González Blázquez como guía.
