INTRODUCCIÓN de la Ruta “Mirador de la Panda y Penyal de los Bous”
La ruta “Mirador de la Panda y Penyal de los Bous” recorre viejos caminos de la zona mallorquina del Raiguer que se extiende justo en las faldas de la Serra de Tramuntana y abarca municipios como Consell, Alaró y Binisalem. Protagonistas indiscutibles de la ruta son el curioso Mirador de sa Panada, el Penyal dels Bous con sus fantásticas vistas y el viejo Camí Romá, procedente de la época romana y que aún conserva su empedrado en buen estado. El paisaje aparece dominado por campos de cereales y olivos combinados con pequeños bosques.
DATOS TÉCNICOS de la Ruta “Mirador de la Panda y Penyal de los Bous”
Fecha de Inicio: 16 Marzo 2023 Hora de Inicio 09:08 Distancia: 12,94 Km Altitud min: 134 m Altitud máx: 404 m Desnivel Positivo: 292 m Desnivel negativo: 292 m Altitud inicial: 138 m Tiempo Total: 05:09 Tiempo Caminando: 03:34 Velocidad media: 3,6 km/h Circular Moderada
ITINERARIO de la Ruta “Mirador de la Panda y Penyal de los Bous”
- Binissalem
- Camí de Ca’n Arabí
- Camí de Can Pere Antoni
- Mirador de sa Panada
- Penyal dels Bous
- Coll d’en Simonet
- Son Llabià
- Camí de sa Sacorrada
- Camí Vell d’Orient
- Son Fortesa
- Bànyols
- Camí Romá
- Can Cabrit
- Camino del Raiguer
- Binissalem
DESCRIPCIÓN de la Ruta “Mirador de la Panda y Penyal de los Bous”
La Ruta “Mirador de la Panda y Penyal de los Bous” tiene como objetivo subir a este Mirador y luego coronar la cima del Penyal, partiendo de Binissalem y regresando al punto de inicio por el Camí Romá y el Camí des Raiguer.
El punto de partida de este itinerario lo he situado en la estación del tren de Binissalem, donde llegamos por el Camí de Pedaç desde la carretera Vella d’Inca, la Ma-13A. Dejamos aparcados nuestros coches en la Calle de Can Juliá y comenzamos a caminar en dirección a la estación. Al llegar a la altura de las vías, giramos a la derecha y las cruzamos por un paso a nivel para seguir por el Camí de Ca’n Arabí, camino asfaltado que avanza recto hacia el norte/noroeste.
Camí de Can Pere Antoni
Un poco más adelante se cruza con el Camí des Raiguer. Por la izquierda es por donde regresamos al final. Ahora continuamos recto por nuestro camino y dejamos a mano derecha el restaurante de Ca’n Arabí, en cuyo aparcamiento otros sitúan el inicio de esta ruta. Pronto llegamos a una bifurcación. De frente tenemos el Camí del Coll d’en Simonet, que ignoramos y por la derecha arranca el Camí de Can Pere Antoni que tomamos.
Se trata de un ancho camino con firme de tierra, que avanza en suave pendiente entre campos de cultivo de secano. Un poco antes de llegar a las casas de Can Maciá y Can Pere Antoni torcemos a la izquierda. Enseguida nos encontramos con una primera barrera que se abre. Traspasada la barrera, torcemos a la izquierda y nos topamos con una segunda barrera que salvamos por el lateral izquierdo.
Mirador de sa Panada
Avanzamos por una cómoda pista que en ligero ascenso se va adentrando en un pinar y poco después el camino hace un giro a la izquierda y se estrecha convirtiéndose en bonito sendero. Vemos otro camino a nuestra derecha que obviamos y luego llegamos a un cruce desde donde podemos ver, a la derecha, en lo alto de una gran roca el precioso Mirador de sa Panada. En el cruce tomamos el sendero de la derecha que en pronunciada subida nos lleva hasta el Mirador. Tiene forma semicircular con una serie de piedras alrededor que sirven de quitamiedos y una mesa en el centro también de piedra. Está situado a 297 m de altitud y nos ofrece una bonita vista de Binissalem y buena parte del Pla de Mallorca.
Desde el Mirador descendemos hasta el cruce y continuamos por el sendero en dirección a nuestro siguiente objetivo: el Penyal dels Bous. Avanzamos unos cuantos metros y giramos a la derecha. Luego iniciamos una fuerte subida por la falda de la montaña, describiendo algunas lazadas para suavizar la pendiente. El sendero, que en algunos tramos es poco claro, se abre camino entre la garriga y grandes rocas. Desde alguna de ellas se disfruta de una estupenda panorámica.
Penyal dels Bous
Al cabo de un rato alcanzamos la cima del Penyal dels Bous, situada a los 403 m de altitud. Esta cumbre nos presenta una panorámica más amplia del Pla de Mallorca, donde distinguimos los pueblos de Lloseta, Inca, Binissalem, Consell, Santa María, etc. En el lado opuesto vemos Alaró, el Puig d’Alaró, Puig de s’Alcadena, el Puig Major y el Massanella entre otros.
Una vez que hemos disfrutado de estas vistas iniciamos el descenso por el lado opuesto al de subida. Enseguida cruzamos la línea divisoria que separa los términos municipales de Binissalem y Alaró, saltando una baja pared seca y entramos en este último término. Luego iniciamos un fuerte descenso entre antiguos bancales, por un terreno resbaladizo. Volvemos a ver ahora a nuestra izquierda la pared de piedra divisoria de términos municipales que no tenemos que cruzar, sino que nos mantenemos paralelos a ella hasta llegar, ya en suave pendiente, al Coll d’en Simonet.
Coll d’en Simonet
El Coll d’en Simonet, está situado a 290 m de altitud y en él confluyen varios caminos. Por la izquierda tenemos el Camino del mismo nombre, que más abajo enlaza con el Camí de Ca’n Arabí, que obviamos. Por la derecha, que es por donde seguimos, tenemos una ancha pista de tierra, que en suave descenso conduce hasta las casas de Son Llabià. Una barrera que se abre nos da acceso a este sitio y aquí arranca el Camí de Son Llabià, asfaltado, que nos lleva hasta el cruce con la carretera Ma-2110, que une Lloseta con Alaró.
Tomamos esta carretera por nuestra izquierda, dirección Alaró, que enseguida abandonamos para seguir por nuestra izquierda por un camino de tierra. Este camino desemboca en el asfaltado Camí de sa Sacorrada, si bien topamos con una barrera cerrada que nos impedía el paso y que superamos por su lateral derecho. Sí no se quiere traspasar esta barrera hay que continuar por la carretera un trozo más hasta llegar al cruce con el Camí Vell d’Orient, a la altura del Alzinar de Son Fortesa.
Son Fortesa
Una vez en el Camí de sa Sacorrada, tras traspasar la barrera, continuamos hasta el cruce con el Camí Vell d’Orient, que tomamos por la izquierda. Enseguida vemos las casas de Son Fortesa, en el lado derecho. Continuaremos ahora en dirección Consell y giraremos a la izquierda por el camino de Bànyols, sin asfaltar. Cruzamos el Torrent de Solleric y después pasamos al lado de las casas de Bànyols, situadas en un lugar privilegiado. Bànyols era una antigua alquería musulmana. De su fachada destacan el portal, la galería y el escudo de piedra. Actualmente se encuentra en obras de reforma.
Camí Romá
Desde las casas continuamos por un bonito camino de tierra, llamado Camí vell de Binissalem, que avanza suave entre campos de secano, bajo la sierra de Bellveure y las casas de Can Moranta. Poco después llegamos a un collado donde se encuentra uno de los tramos empedrados más espectaculares del Raiguer, conocido popularmente como el Camí Romá, pues al parecer en su origen fue una calzada romana. Aquí dejamos el término de Alaró y entramos de nuevo en el de Binissalem. Descendemos por el empedrado, con las casas de Can Moranta a nuestra izquierda. A medida que vamos descendiendo el adoquinado desaparece hasta desembocar en el Camino del Raiguer.
Tomamos este camino por nuestra izquierda y en una doble curva encontramos las casas de Can Cabrit. Se trata de un conjunto de tres posesiones conocidas como la Torre de Can Moranta, Can Cabrit y Can Ximarró. De origen medieval, las tres conformaban una especie de alquería. Avanzamos por este camino hasta llegar al cruce con el Camí de Ca’n Arabí, que he mencionado al principio y donde cerramos el círculo de la ruta. Desde aquí ya solo nos queda realizar el mismo recorrido pero en sentido inverso, hasta llegar al punto de partida, donde damos por finalizada esta interesante excursión.
Los componentes del grupo hemos sido: GRUPO GMMHIIB y yo Juan González Blázquez como guía