INTRODUCCIÓN de la ruta “Etapa 5:San Roque-Buxán”
La ruta “Etapa 5:San Roque-Buxán” del Camino de Fisterra-Muxía es una ruta solo de ida. Se inicia en el barrio marinero de San Roque en Finisterre y finaliza en la aldea de Buxán. En esta etapa llegamos al cabo de Finisterre, considerado el fin del mundo hasta hace apenas medio milenio , donde podemos contemplar la inmensidad del océano. Regresamos a Finisterre por el Monte Facho que ofrece magnificas vistas del cabo y como nuestro objetivo es ir a Muxía, continuamos hasta Buxán, ya por un territorio más rural , donde el asfalto ha dado paso a caminos de tierra, con bosques y alguna que otra cuesta.
DATOS TÉCNICOS de la ruta “Etapa 5:San Roque-Buxán”
Fecha de Inicio: 10 Octubre 2024 Hora de Inicio 11:09 Distancia: 16,74 km Altitud min: 0 m Altitud máx: 232 m Desnivel Positivo: 445 m Desnivel negativo: 364 m Altitud inicial: 0 m Tiempo Total: 06:26 Tiempo Caminando: 04:31 Velocidad media: 3,7 km/h Sólo Ida Moderada
https://www.relive.cc/view/vrqowD2rPKq
ITINERARIO de la ruta “Etapa 5:San Roque-Buxán”
- San Roque (Finisterre)
- Cruz de Baixar
- Castillo de San Carlos
- Finisterre
- iglesia de Santa María das Areas
- Faro de finisterre
- Cabo Finisterre
- Mirador de Solpor
- Mirador do Monte Facho
- Barrio de Insúa de Finisterre
- Puerto
- San Martiño de Duio
- As Escaselas
- Hermedesuxo de Baixo
- O Bispo
- San Salvador de Duio
- Rial
- Buxán
DESCRIPCIÓN de la ruta “Etapa 5:San Roque-Buxán”
La ruta “Etapa 5:San Roque-Buxán” del Camino de Fisterra-Muxía tiene como objetivo recorrer el camino que va desde el barrio marinero de San Roque en Finisterre hasta la aldea de Buxán, de la parroquia de Sardiñeiro , en el Concello de Fisterra, haciendo un total de 22,74 km.
El punto de partida de este itinerario lo he situado en San Roque, concretamente en el aparcamiento que hay frente al restaurante Tira do Cordel, lugar al que llegamos al finalizar la etapa 4. Comenzamos a caminar por la Rua da Cruz de Baixar, que en pocos minutos nos acerca al cruceiro de este mismo nombre, situado sobre un penedo y con un bonito mirador con vistas a la playa y el puerto. Aquí tomamos la Avenida da Coruña, que comparte trazado con la carretera AC-445. Por esta avenida entramos en el casco urbano de Fisterra.
Castillo de San Carlos
Pasamos ante el edificio del concello (Ayuntamiento) y poco después superamos la plaza de Santa Catalina y siguiendo la Rúa Real llegamos a la plaza de la Constitución, donde se encuentra la Oficina de información turística. Aquí nos entregaron la Fisterrana, documento en el que el alcalde de la villa certifica nuestro periplo desde Santiago hasta Finis Terrae. Desde la plaza, callejeando, bajamos hasta el puerto y tomamos el Paseo da Ribeira,que bordeando la playa de ese mismo nombre, nos acerca hasta el Castillo de San Carlos.
Iglesia de Santas María das Áreas
Este edificio presenta una forma irregular para adaptarse al terreno rocoso sobre el que está asentado. Fue construido a mediados del S. XVIII, dentro de un plan defensivo de la ría de Corcubión. Sufrió un incendio durante la Guerra de la Independencia y ha sido recientemente restaurado. Visitado este lugar accedemos a la carretera AC-445, que conduce hasta el faro. Al salir del pueblo encontramos un bello cruceiro gótico y detrás de éste la iglesia de Santa María das Areas, cuyo origen como hospital de peregrinos data de los siglos XII-XIII.
El Cruceiro es uno de los más destacados de Galicia con una cruz potenzada con Cristo crucificado, la Virgen y San Juan en el anverso y en el reverso la Virgen con el Niño. El templo parroquial de Santa María das Areas es uno de los monumentos artísticos más notables de todo Fisterra, y además hito histórico y objetivo de la devoción de miles peregrinos a lo largo de la historia. Seguimos avanzando, caminando ahora, en suave subida, por un andadero, situado a la izquierda de la carretera, que nos protege del tráfico rodado. Casi un kilómetro más arriba, en una curva, se encuentra el Monumento al Peregrino, una estatua de bronce con un peregrino luchando contra el viento.
Faro de Finisterre
Poco después vemos al otro lado de la carretera la Fonte Cabanas, una fuente con agua procedente de un manantial, fresca y potable. A continuación, a nuestra izquierda, encarado al mar, se encuentra el curioso Cementerio Novo César Portela formado por 14 cubos de granito. Seguimos avanzando hasta el final de la carretera, donde a mano derecha hay un aparcamiento y la desviación para subir al Monte Do Facho y a nuestra izquierda un cruceiro levantado sobre un penedo y un tenderete de madera con artesanías y souvenirs. Un poco más adelante está el mojón del kilómetro 0, las esculturas de unos delfines y un bar.
Más allá, en lo alto de unas rocas, se halla el edificio que alberga el pequeño Hotel O Semáforo, de tan solo cinco habitaciones. Avanzamos un poco más y llegamos al Faro de finisterre, edificio construido a mediados del siglo XIX. La torre es de cantería y base octogonal, de 17 m de alto con una cornisa sobre la que se apoya la balconada. La bóveda tiene una linterna poligonal. Su luz, situada a 143 m sobre el nivel del mar, consigue más de 23 millas náuticas. La constante niebla del invierno provocó que en 1888 se le añadiera, justo detrás, una casita llamada la Vaca de Fisterra, provista de grandes sirenas para avisar a los navegantes del peligro existente.
Cabo de Finoisterra
Bajamos unas escaleras y llegamos a la punta del cabo. El Cabo Finisterre forma una península rocosa de granito que se adentra en el océano atlántico y durante mucho tiempo se ha considerado el punto más occidental de la península ibérica. En la época romana se creía que era el fin del mundo conocido. Entre las rocas vemos una cruz de granito, una antena y la pequeña escultura en bronce de una bota vieja, antes había dos pero la otra ha desaparecido. En este punto los peregrinos solían abandonar las botas utilizadas durante el periplo. Actualmente esto no está permitido.
Mirador de Solpor
Una vez que hemos disfrutado de este lugar volvemos sobre nuestros pasos hasta la desviación que conduce al Monte Do Facho. Tomamos una pista asfaltada que enseguida abandonamos para seguir, en fuerte subida, por un sendero escalonado provisto de una barandilla metálica. Más arriba atravesamos una zona de espesa y alta vegetación y en pocos minutos desembocamos en la pista asfaltada en el punto donde se encuentra el Mirador de Solpor, que nos ofrece unas vistas espectaculares sobre el cabo, sus acantilados, los dos litorales, al este y al oeste de la alargada península de Fisterra y, como telón de fondo, la inmensidad del océano.
Continuamos subiendo por la pista asfaltada y sin necesidad de subir a la cima del Monte Do Facho, que queda a nuestra izquierda, alcanzamos el punto más alto por el que pasa el camino, donde se encuentra el Mirador do Monte Facho, que también ofrece estupendas vistas. Después continuamos en descenso por un ancho camino de tierra que discurre por el bosque. Más abajo desembocamos en una antiquísima calzada de piedras irregulares por la que entramos en el barrio de Insúa de Finisterre. Callejeando llegamos al puerto donde paramos para comer un suculento pulpo en un bar-restaurante.
Buxán
Después de comer continuamos nuestra caminata. Callejeando salimos de Finisterre por el Camiño da Barcia, pista asfaltada que nos acerca a la parroquia de San Martiño de Duio. La iglesia, junto al Camino, es barroca del siglo XVIII y está compuesta de una sola nave con sacristía adosada. Seguimos avanzando por asfalto y pasamos por As Escaselas, luego llegamos hasta Hermedesuxo de Baixo, que vemos a mano izquierda y a O Bispo. En este punto el camino se desvía a la derecha hacia San Salvador de Duio.
Enseguida finaliza el asfalto y comienza una bonita pista de tierra que , en subida, se adentra en un espeso bosque y llega hasta Rial. Desde aquí el camino, ahora en bajada, sigue hasta Buxán. En este lugar damos por finalizada la etapa 5.
Los componentes del grupo hemos sido: GRUPO GMMHIIB y yo Juan González Blázquez como guía.
